Hola después de muchos meses.
Se me han ido de las manos tantos temas que en su momento quise tocar, pero que debido al poco tiempo con el que cuento me fueron imposibles de plasmar. Quizás, cuando sienta la necesidad de escribirlos lo haré, prefiero dejarlos pasar por ahora.Ya no es su momento.
El tiempo ha ido tan rápido y mi vida ha cambiado tan de repente que ni yo mismo me había dado cuenta.
Muchas veces vamos avanzando, seguimos nuestra rutina como todos los días, vamos por el mismo camino, hacemos las cosas con el mismo procedimiento, al bajarnos de la cama ponemos siempre el mismo pie en el suelo antes que el otro, abrimos la puerta con la misma mano, nos confundimos en las mismas cosas, escuchamos la misma emisora de radio, las mismas canciones de nuestro reproductor musical (a pesar de haber bajado muchas otras canciones), ya nos sabemos la rutina que dará el carro para llevarnos al trabajo o al instituto, vemos los mismos programas de televisión y entre tantas otras cosas que estoy seguro no cambias desde hace mucho.
A veces creemos que hemos llegado a un punto estable cuando sabemos qué es lo que tenemos que hacer, cuándo y cómo. De hecho en ciertos aspectos puede ser cierto, pero en otros tanto no es así.
Lo rutinario, aburre.
Lo rutinario, aburre.
Hace siete meses aproximadamente mi vida cambió.
Dejé las cosas a las que estaba acostumbrado por empezar a realizar otras.
Entré a trabajar a un lugar demasiado complicado para mí, ignoraba que sea tan difícil hasta el momento en el que entré. Desde el primer día fue todo muy complicado, y si te soy sincero puedo decirte que al día siguiente no quería volver, ni modo ya tenía un contrato firmado por 3 meses, así que tuve que hacerme la idea de soportar otros 90 días más aproximadamente en mi nuevo trabajo.
No quiero recordar lo duro que se me suscitó todo porque ahora que ya me di a conocer en esta empresa todo ha mejorado.
El detalle es que tuve que cambiar todo, mis horarios al dormir, al almorzar, mis días libres, dejar de ver a amistades cercanas, ver poco a mi familia (a pesar de vivir bajo el mismo techo), desengancharme de todo a lo que yo mismo me había atado.
Me costó muchísimo, no tienes ni idea, y de hecho me sigue costando, pero ya he asimilado todo.
Todo irá tomando su rumbo para tu bien y el de tu familia, eso si : poco a poco.
Te costó, te cuesta y te costará, como a todos, no eres ni serás el único. Piensa siempre en ello, eso ayuda mucho.
Los más cercanos a mí saben cómo andaba de desganado, de frágil, de enojado, estresado y de todo. Ahora tengo los ánimos suficientes para decirme a mí mismo que he mejorado mucho (sin caer en vanidades), que mi esfuerzo está dando sus frutos, que entré en un mundo que jamás pensé conocer, que me tracé una meta que estoy cumpliendo poco a poco, que he salido adelante y solo, pues debía de darme a conocer bajo mis propios méritos.
A 3 horas de cumplir 19 años, puedo decir que estoy feliz con lo que he logrado hasta hoy, que ha sido largo el viaje pero al fin llegué, que estoy rodeado de gente que Dios a puesto en mi camino, que estoy seguro que Él me los envío por algo, o que me envío a mí en tu vida por algo.
Hay días malos, de desgano, de bajoneos, sí; pero esos días no pueden arruinar ni tienen el poder de borrar los mejores días de tu vida. Date ánimos, no necesitas de nadie, primero eres tú contigo mismo.
No te guardes nada, habla, exprésate y se feliz.
Eres joven, y si sientes que ya no lo eres recuerda que aún posees fuerza como tal.
Quiérete, respétate.
No estás solo, estoy yo cuando necesites de algo, tu familia (quien sea que la conforme), tus amigos, y Dios.
Cree en tí. No tengas miedo, tú eres fuerte.
Éxitos.
AZM
Grandes palabras de una gran persona.
ResponderEliminarMuy bueno, ya es hora de q me puedas dar unos tips. xD
ResponderEliminar